(10/07/2013) 21:30h pm - Los segundos se hacen minutos y los
minutos se hacen horas rodeada de un abasijo de gigantescas máquinas de
metal que creo que me van a engullir en cualquier momento, a la espera de
lo q va a ser una inmejorable noche.
23:15h pm - La arena de la playa
inunda nuestros calzados. ¡Zapatos fuera!. Derepente una voz y una
guitarra roba nuestra atención con palabras que me parecía haber
escuchado ya.
Nos faltan brazos para seguir rodeandonos, boca para
besarnos, tiempo para prestarnos, pero en cambio desbordamos amor para
querernos aún sin decirlo, tal vez aún sin saberlo, o incluso sin querer
asumirlo.
(11/07/2013) 00:35h am - Estamos atrapados y sumidos el uno
en el otro.
Ahora las horas parecen minutos y los minutos parecen
segundos. ¿Qué está pasando? Lo que está pasando es justo lo que nuestras
intensas miradas se dicen en silencio. En algún momento hay q desnudar
el corazón y dejar que se exprese con total libertad. Tiene cosas que decir.
3:41h am - Un gesto tímido llama mi atención. El corazón tiene algo que
decir, tiene algo que gritar al mundo, algo que susurrarme a mí al oído.
Un
TE QUIERO se dispara haciendo estragos acompañado de una mirada fija y
angelical a la espera de alguna reacción. Reacción: Un silencio
ensordecedor juega una mala pasada, una mala interpretación. Ése
silencio refleja el otro TE QUIERO que aún está ordenando las letras en la
temblorosa garganta. Por fín sale. No existe nada más. Somos nosotros y
el mundo.
Y sí, hay que reconocer que ahora sí estamos a 3 metros sobre el
cielo y puedo decir con total libertad y llena de orgullo que ¡TE QUIERO!.
Esto es sólo nuestro, nene.
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